El austríaco Helmut Marko, los ojos y oídos de Dietrich Mateschitz en Red Bull Racing, descartó cambios en la planta impulsora de Verstappen en el GP de Arabia Saudita.

Se contaba ayer en Continental Web que Honda presionaba a Red Bull para concretar el cambio en el motor atmosférico para mitigar la diferencia de performance con Mercedes (que, como todo el año desde Silverstone, se basa en la fase de aceleración en recta, no en mera velocidad punta) en un circuito como el de Jeddah, casi sin curvas ni chicanas reales.

Max continuará con el motor estrenado en Rusia en septiembre, que acumula más de dos mil kilómetros. Sin embargo, Red Bull se muestra conforme con la fiabilidad que ha presentado el motor japonés este año. El cambio de motor atmosférico implicaría una sanción de cinco posiciones en la grilla de salida del domingo.

La unidad de potencia de Honda presenta una vida útil más 'noble', con menor descenso de performance que Mercedes. Los alemanes, en cambio han asombrado cada vez que estrenan un motor, pero después de los dos primeros Grandes Premios el descenso de performance es más acusado, y los ha dejado impotentes detrás del neerlandés en más de una carrera en la que Hamilton mostraba más ritmo que el aguerrido Verstappen.

No obstante, en declaraciones a F1 Insider, Marko no descartó cambios en la planta impulsora en Abu Dhabi. La pregunta es si el cambio no vendrá tarde y mal: ¿en serio van a entregar cinco posiciones en la carrera más potable para obtener la victoria que Max necesita para ser campeón sin depender de eventuales problemas o errores ajenos?