Tras un 2021 lleno de polémicas dentro y fuera de pista, entre ellos con autos que no pasaban el chequeo técnico de la FIA, la entidad rectora de la F1 se prepara para revisar los autos a través de tecnología láser. Los equipos deberán presentar modelos 3D de sus monoplazas divididos en secciones para que los comisarios las escaneen.

El director técnico de Liberty Media / FOM, Pat Symonds, prestará atención especial a la zona tras el alerón trasero, sobre todo en el área del difusor. “Se puede ganar mucho tiempo de vuelta con ciertos trucos”, explicó Symonds, baqueano si los hay en toda clase de trucos cuando trabajaba en Benetton y Renault. Hasta hoy mismo, los comisarios revisan los autos con la regla, como en tiempos de Fangio.

Así, desde el año próximo los equipos deberán entregar “cajas de legalidad” en modelos 3D que la FIA escaneará para verificar si cada coche coincide con las especificaciones requeridas por el Reglamento Técnico.

Symonds sigue esperanzado en que, si el nuevo concepto de auto de 2022, con menos injerencia de las alas y uso del efecto suelo, facilita los adelantamientos en pista, el DRS podría desaparecer en 2024 y ser reemplazado desde 2026 con aerodinámica activa.

Con ello, se buscará reducir el consumo de combustible, uno de cuyas incidencias principales es la resistencia al aire en las rectas a nivel de los alerones, pero también de los neumáticos, que serán un 33 por ciento más altos el año próximo.

Sin embargo, los coches pesarán más de 790 kilos en 2022, con la incorporación de baterías mucho más pesadas que serán las encargadas de crear la mitad de la potencia de los autos (contra un 15 a un 30 por ciento de este año).