El gaslighting es abuso psicológico, una forma especial del mismo, en la que una persona hace que alguien cuestione su realidad, explica la publicación Psychology Today, y agrega que muchas personas siguen siendo incapaces de reconocerlo.

De acuerdo a dicho medio, l as personas que emplean el gaslighting como táctica de manipulación son expertas, y por supuesto prefieren usar estas habilidades en entornos que ayudan, en lugar de obstaculizar, sus ataques. 

El gaslighting requiere sofisticación y una conciencia profunda de las emociones, pensamientos y reacciones potenciales de los demás. Aquellos que usan esto como un método de control buscarán personas que caigan más fácilmente en sus trampas; están a la caza de víctimas que tomarán la menor cantidad de energía para dominar. Aprender a evitar el gaslighting es una importante herramienta de supervivencia interpersonal. Debido a que las personas que hacen gaslighting a otros juegan con los miedos y la energía de sus víctimas, es crucial reconocer las señales de advertencia de que puedes estar habilitándolos.

Psychology Today enumera cinco señales de advertencia de que podrías estar siendo víctima.

1. Constantemente te degradadas. Los individuos que hacen gaslighting están a la caza de tus debilidades. Quieren saber cómo explotarlas y cómo usarlas como base para hacerte cuestionar la realidad. ¿Tienes miedo al fracaso oa causar una impresión negativa en los demás? Los gaslighters saltarán sobre estos temores  para convencerte de que los comportamientos saludables, como establecer límites o decir "no", harán que estos temores se hagan realidad. 

2. Pensamiento en blanco y negro. Muy pocas cosas, o personas, son todas buenas o todas malas. Cuando te quedas atascado en el error cognitivo del pensamiento en blanco y negro (la tendencia a ver todo en extremos, o en absolutos) pierdes tu capacidad de entender la complejidad del mundo (y las relaciones) a tu alrededor.

Aquellas personas que quieren controlarte prosperan en el pensamiento en blanco y negro porque pueden usarlo para influir en tus opiniones, especialmente donde realmente importa.
3. Caminar sobre cristales. Sentir que cualquier movimiento "incorrecto" que haya desencadenará comportamientos negativos y aterradores en otra persona debería enviar campanas de alarma internamente. Las personas que usan gaslighting son maestras en titiritear todos tus pensamientos y comportamientos, incluso hasta el tono de voz que usas cuando interactúas con ellos.

Si te sientes asustado de desafiar los pensamientos, suposiciones o comportamientos de otra persona, especialmente hasta el punto en que te sientes culpable solo en desafiarlos, y preocupado de que de alguna manera adivinen que te sientes de esa manera, es muy probable que estés instigando a alguien que te esté controlando.

4. Minimizar tus reacciones. La intuición es una poderosa herramienta contra la manipulación. El problema con el gaslighting es que ataca tu intuición desde el principio, causando estragos internamente y lo que te lleva a preguntarte si puede confiar en tu propio sentido de lo que es real. Los gaslighters quieren que creas que tu intuición es irracional y te hace reaccionar exageradamente. 

5. Creer que no hay salida. Conseguir que una víctima se sienta desesperada es el paso final antes de ejercer un control total sobre ella. Las personas que pierden la esperanza creen que la forma en que las cosas como están, no importa lo dolorosas o peligrosas que sean, son la única opción que tienen. Los gaslighters tienen el objetivo final de convencer a sus víctimas de que la realidad alternativa en la que viven es realmente real.

Aprender pequeñas maneras de parar el gaslighting antes de que se convierta en un patrón predominante en tu vida es clave para desarrollar y mantener relaciones saludables y empoderadoras. Las personas involucradas en las relaciones de control o manipulación tienen la responsabilidad de analizar los patrones que ocurren e intervenir inmediatamente cuando detectan señales de alerta. Todo el mundo merece relaciones confiables, libres de abuso y manipulación, explica Psychology Today.