El gobierno de Canadá anunció que prohibirá la fabricación e importación de una serie de plásticos de un solo uso "dañinos”, con varias regulaciones nuevas que entrarán en vigor en diciembre.

Las nuevas reglas, anunciadas hoy, se aplicarán a las bolsas de pago, los utensilios, los productos de servicio de alimentos con plástico difícil de reciclar, los portadores de anillos, los palillos para revolver y las pajitas con algunas excepciones, anunció el gobierno en un comunicado.

“Nuestro gobierno está comprometido con la reducción de la contaminación plástica.Es por eso que anunciamos hoy que nuestro gobierno está cumpliendo su compromiso de prohibir los plásticos nocivos de un solo uso”, dijo el ministro de Medio Ambiente, Steven Guilbeault, en una conferencia de prensa el lunes.

“Este es un paso histórico para vencer la contaminación plástica y mantener limpias nuestras comunidades, tierras y océanos”.

La venta de dichos artículos estará prohibida a partir de diciembre de 2023, un período de amortiguación destinado a dar a las empresas tiempo para adaptarse a los cambios y reducir sus suministros existentes.

El gobierno también prohibirá la exportación de seis plásticos para fines de 2025.El gobierno federal enumeró los plásticos como tóxicos en virtud de la Ley de Protección Ambiental de Canadá el año pasado, lo que allanó el camino para que las regulaciones prohibieran algunos. Sin embargo, un consorcio de productores de plásticos está demandando al gobierno por la designación de tóxico en un caso que se espera que se escuche a finales de este año.

Canadá usa 15 mil millones de bolsas de plástico para pagar al año y 16 millones de popotes por día, dijo el gobierno.

Un informe reciente de la ONU ha dicho que se espera que el uso global de plásticos se triplique para 2060, y que la producción anual de plásticos a base de combustibles fósiles alcance más de 1.200 millones de toneladas para el mismo año. Los residuos creados por tales niveles de producción serían más de mil millones de toneladas por año.

Dichos informes han contribuido a un creciente sentido de preocupación en todo el mundo con respecto a la prevalencia de los plásticos y los problemas que causan para la contaminación y el medio ambiente. En los últimos 70 años, el mundo ha producido alrededor de 8300 millones de toneladas de plástico, el 60 % de las cuales se ha desechado en vertederos, océanos y ríos, o se ha quemado.

Algunos grupos de fabricación en Canadá habían expresado previamente su oposición a las regulaciones propuestas, a pesar de las promesas del gobierno de dar tiempo a las empresas para adaptarse. Grupos conservadores, como el Instituto Económico de Montreal (MEI), han dicho que las regulaciones perjudican las "innovaciones potenciales" en la industria delplástico y "dañarán la economía sin ninguna garantía de ayudar al medio ambiente". Al menos el seis por ciento de los fondos de MEI proviene de la industria del petróleo y el gas.

El gobierno canadiense ha dicho que "consultó ampliamente para buscar información para informar el desarrollo de las Regulaciones propuestas, y escuchó que las empresas necesitaban orientación para cambiar a productos y sistemas alternativos disponibles".