El primer ministro británico, David Cameron, imploró a los escoceses que rechacen la independencia y mantengan "intacta" la familia del Reino Unido, en un intento por detener el firme ascenso del apoyo secesionista antes del referéndum del 18 de septiembre.

"No queremos que esta familia de naciones se despedace", dijo Cameron, de 47 años, en un artículo de opinión publicado en el diario británico Daily Mail. Entre el mensaje emotivo y una clara advertencia, agregó: "Si Reino Unido se rompe, se rompe para siempre".el pánico instalado al interior de la élite política británica, Cameron y el líder de la oposición, Ed Miliband, suspendieron su sesión semanal de interpelaciones políticas para visitar Escocia hoy y pedir a los escoceses que no rompan su unión de 307 años con Inglaterra.

En su artículo, el premier conservador destacó que el mundo mira con "admiración y envidia" los avances conseguidos por el Reino Unido moderno, como el Servicio Nacional de Salud (NHS, por sus siglas en inglés) o el sistema de pensión estatal.

"El Reino Unido es un país querido y especial. Eso es lo que está en juego. Así que nadie en Escocia tenga ninguna duda: queremos desesperadamente que ustedes se queden", completó.

Cameron también defendió la campaña llevada a cabo por el campo unionista -formada por los principales partidos británicos- al afirmar que ha sido clara sobre lo que está en juego, pero criticó la del jefe de gobierno escocés, Alex Salmond, por considerar que solo ofrece interrogantes sobre el futuro de Escocia.

"Un voto por el 'no' no significa un voto a favor del 'status quo'. No significa que no hay cambio. Significa que habrá más autonomía para Escocia", subrayó el primer ministro británico. "No se trata -agregó- de Escocia frente al resto del Reino Unido. Se trata de dos visiones que compiten por el futuro de Escocia".