Otra cómoda victoria de Max Verstappen en el GP de Hungría de F1. El neerlandés tramitó con la solvencia de siempre la ventaja no abismal que tiene Red Bull en aspectos clave de la performance. Le alcanza para dominar tiránicamente el campeonato ante la debacle de Pérez (que sigue remontando desde atrás hasta el podio) y la paridad histórica del segundo para atrás.