Es el año de la verdad para Mattia Binotto, el poco expresivo director de Ferrari. Tras los movimientos en la cúpula del ahora llamado Grupo Stellantis (que incluye a Fiat, Ferrari, Peugeot y Chrysler, entre otras marcas) y la correspondiente eyección de Maurizio Arrivabene, el suizo esperanzó a los tifosi con un supermotor que puso contra las cuerdas a Mercedes durante gran parte del año.