Para el senador radical Ernesto Sanz el ministro de Planificación “sobreactuó sus críticas” hacia él.

Julio de Vido salió al cruce de los dichos del presidente de la UCR acerca de que “si Néstor Kirchner viviese no lo hubiera saludado” como hizo Cristina Fernández durante el acto de anuncio del megayacimiento gasífero.

El ministro afirmó que las declaraciones del legislador “son de una bajeza extrema” y que “da pena ver a un partido centenario, como el radicalismo, en manos de dirigentes mediocres e ignorantes”.

“No hice más que reflejar la realidad que vivió mi partido durante la gestión del ex presidente”, se excusó en La Mañana el senador mendocino.

"Cuando contesté la pregunta que me hizo un periodista lo hice desde el punto de vista institucional. El hecho que la presidenta haya tenido ese gesto conmigo y con otros dirigentes de la oposición (al convocarlos al anuncio del megayacimiento de Neuquén) habla bien; habla de un avance y de un cambio", ponderó el senador cuyano.

En cuanto a la agitada interna radical, en la que tercia sobre las opciones que había hasta ahora (Julio Cobos y Ricardo Alfonsín), afirmó que le
"importan más los respaldos desde adentro del radicalismo que los que vengan de afuera. En su momento veré si esos respaldos comportan un esquema de competitividad".

E insistió en que "no hay certidumbres respecto del cumplimiento de la ley electoral nacional".