La presidenta Cristina Fernández aseguró que la situación a partir de la toma del Parque Indoamericano, "no se desmadró", sino que "se apadrinó".

Durante un discurso que ofreció en la localidad bonaerense de José C. Paz, donde inauguró un nuevo centro de documentación rápida, la presidenta se quejó de que desde que asumió en el cargo algunos “se ocuparon puntillosamente de ponerme piedras en el camino”.

La jefa de Estado mencionó los episodios de tomas que se desencadenaron a partir del conflicto en el Parque Indoamericano. Sin nombrar al jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, la mandataria dijo que “algunos le echan la culpa a los demás en lugar de gobernar” y convocó “a todos” a “respetar la vida del otro”.

Fernández también lanzó críticas a quienes “no pudiendo conquistar el lugar de presidente por el voto popular hayan intentado socavar a los que sí lo logramos y entones realizan provocaciones y operaciones que se ven todos los días”.

Asimismo, la presidenta mencionó a su esposo y ex presidente fallecido Néstor Kirchner. “Fue él quien me enseñó que los gobernantes deben ponerse al frente de los problemas y no echarle la culpa a los demás”, dijo.

Además, lo recordó como “un trabajador incansable, que dedicó su vida a la militancia y por eso murió”.