Guillermo Borger rechazó por Continental las afirmaciones del canciller Héctor Timeran, quien, durante su exposición en el plenario de comisiones del Senado, consideró que el memorándum firmado es una forma de "destrabar" la causa que investiga el atentado a la AMIA.

"Dar el brazo a torcer ante Irán no es ningún avance de la causa. Esto es un retroceso", expresó en Magdalena Tempranísimo el presidente de la mutual judía. "Estamos hablando de Irán, es un Estado teocrático, negacionista, que niega la peor tragedia que sufriera toda la humanidad (el Holocausto). Quien niega la peor tragedia no puede ser confiable ni un segundo en esta difícil pulseada", arguyó.

"No tuve ningún contacto con ella (después de sus mensajes). No es mi idea ni mi intención polemizar con la Presidenta. No hablé más nada y hoy sí sigo manifestándome", fue todo lo que dijo sobre su exabrupto acerca de la posibilidad de un "tercer atentado".

Aunque aclaró que éste "es el Gobierno que más ha hecho para impulsar la causa", Borger consideró un "error" el memorándum que el Congreso Nacional se dispone a firmar, que incluye, como observador del proceso llevado adelante por la Justicia argentina, una comisión de juristas internacionales. 

"Los integrantes de esta comisión que se prende de juristas intachables… la mitad estaría digitada nada menos que por Irán. ¿Quién determinaría que son juristas intachables?", se preguntó, y reconoció que "recién ayer" pudieron tener acceso al texto del memorándum en inglés sobre cuyos términos estuvieron hablando toda la semana, el cual servirá para definir discusiones "en caso de haber algún diferendo".

Allí, Borger encontró que la palabra "interrogar" que figura en el punto cinco del acuerdo fue traducida como "question". "Eso es prácticamente un reportaje", opinó.