La Argentina demandó al gobierno de Ghana en reclamo por el reabastecimiento y la salida de la Fragata Libertad ante el Tribunal Internacional del Derecho del Mar, con sede en en la ciudad alemana de Hamburgo luego de que este martes a las 21 venciera el plazo para que el gobierno ghanés levantara el embargo sobre el buque.

La medida fue confirmada el lunes por el canciller Héctor Timerman, al informar que este martes vencía el plazo para que el Gobierno de Ghana levante el embargo sobre el buque escuela, dictado por la justicia de ese país a raíz de una demanda de un fondo buitre que reclama por impagos de la deuda soberana.

"Un día después, el 14 de noviembre, Argentina quedará habilitada para presentarse ante el Tribunal del Mar", había advertido el canciller en caso que Ghana no liberara la Fragata, tal como no sucedió.

El lunes, el Canciller Héctor Timerman y el ministro de Defensa Arturo Puricelli habían anunciado que el navío argentino se encuentra sin servicio eléctrico por disposición de las autoridades portuarias de Tema y aseguraron que el Gobierno apelará al Tribunal del Mar.

Puricelli calficó el corte de suministros como "una violación de los derechos humanitarios esenciales", al tiempo que detalló las comunicaciones y reuniones llevadas adelante con funcionarios locales para interceder en el conflicto.

La Fragata Libertad permanece retenida en el Puerto de Tema desde octubre por una orden de la Corte Superior de Ghana, a pedido de un reclamo de los fondos buitres.

Los demandantes son NML Capital Limited de Elliot Management y Huntlaw Corporate Service, un grupo que representa todo tipo de fondos de inversión y realizaron el pedido ante la justicia ghanesa en un intento por cobrar los fallos que obtuvieron en su favor en las Cortes de Nueva York.

La presidente Cristina Fernández también criticó duramente el lunes a los fondos de inversión que retienen a la Fragata durante la inauguración de una planta de laminados industriales en la ciudad santafesina de Villa Constitución.

"Es mentira que los fondos buitres son inversores. Tuvieron dos oportunidades para ingresar al canje y no quisieron entrar. Ese fondo (por NML) compró papeles de la deuda de 1994 por cinco pesos y se negó a ingresar a cualquiera de las dos estructuraciones de deuda", sentenció la mandataria.