“Después de los 40 allanamientos y el secuestro de armamento, tecnología y tres detenciones hay cinco prófugos. Resulta vital el trabajo de la fiscal para dar con su paradero” de ellos, advirtió el ministro de Seguridad y Justicia de la provincia de Buenos Aires, Ricardo Casal, en el marco del suicidio de uno de los sospechosos que despejó varios caminos en la investigación para dar con los responsables del asalto al blindado de Panamericana que dejó dos policías muertos.

En ese sentido, precisó, “de acuerdo con las investigaciones policiales y judiciales, las tres personas detenidas forman parte de la banda, estaban en el lugar. Carrizo es uno de los detenidos, que además está involucrado en otros delitos”.

“Creo que está desbaratada la banda tras los apresados; está esclarecido quiénes intervinieron y cuáles fueron sus roles en el hecho”, advirtió el funcionario.

Suicidio y esclarecimiento. “Teníamos varias líneas de investigación. Según averiguó la policía, (Quatrocchi) había dicho que se sentía muy acorralado, que no tenía salida y que el hecho había sido muy grave. Desgraciadamente tomó la decisión de quitarse la vida, algo absurdo porque podría haber enfrentado a la justicia”, lamentó Casal.

“Todo se relaciona con todo; no es extraño descubrir que alguno de los detenidos hubiera tenido alguna relación con (el conocido ‘Gordo’) Valor. La gente del mundo del delito organizado alquilan logística en un lado, los autos en otro y hay que ser muy ágil para poder encontrarlos”, sostuvo en Bravo.Continental.