En el Día de la mujer, que conmemora también la lucha de género, Selva Herbón sigue reclamando una ley para que su hija pueda morir.

Camila tiene 2 años y está en estado vegetativo desde que nació. Su cuadro es irreversible, tiene respirador en forma permanente y se alimenta a través de un botón gástrico.

“Como papás, pedimos la eliminación del soporte terapéutico, que no se prolongue esta agonía. Los médicos dicen que sería justo pero no es legal”, enfatizó Herbón, quien busca acelerar el trámite de denominada ley de Muerte Digna, que ya tiene media sanción en la Cámara de Diputados.

El 28 de marzo está previsto que la norma se debata en el Senado.