Luego de que el juicio entre Johnny Depp y Amber Heard concluyera en la victoria del actor, tomó notoriedad la historia de Kate James, una ex trabajadora de Heard.

En 2020, James la acusó de haberle robado su propia historia como víctima de violencia sexual al momento en que se desarrollaba el primer juicio por difamación entre la pareja. La ex asistente expuso varias quejas contra Heard, argumentando haber vivido maltrato mientras trabajaba para ella recibiendo un sueldo muy bajo por más de 10 años con tareas que iban desde ir de compras hasta ocuparse de la administración.

Según la ex empleada: "Me pagó 25 dólares por hora para empezar y finalmente accedió después de gritarme insultos, a que me pagaría 50 mil al año una vez que comenzara a trabajar a tiempo completo", indicó.

Pero además, durante el último juicio que ganó Deep, James dijo que había sido víctima de abuso sexual en Brasil cuando tenía 20 años y que al leer las presentaciones de la actriz, notó que ella había tomado su historia para atacar a su ex marido.

"Para mi total conmoción y consternación, descubrí que la señora Heard había robado mi conversación sobre violencia sexual y la había convertido en su propia historia para beneficiarse a sí misma”, afirmó la declarante. E indicó que daba a conocer públicamente su situación para dejar en claro que no es correcto mentir sobre ser "una sobreviviente de violencia sexual y es muy serio adoptar esa postura si no lo eres".