Detuvieron al joven asesino del policía Adrián Falduto, que se había fugado del Penal en el que purgaba una cadena a perpetua.
En 2002 Matías Milliorini mató de un balazo en la nuca al custodio del entonces canciller Carlos Ruckauf.
El Tribunal de Ejecución Penal le dio salidas laborales, pero nunca más volvió a la cárcel.
Finalmente, lo arrestaron tras un robo a mano armada a un restaurante de Palermo.
Por Continental, el abogado de la familia Falduto, Marcelo Rochetti, definió como “inexplicable” la decisión del juez Delgado de dejarlo en libertad.
En Magdalena Tempranísimo, fustigó también a “todos” los integrantes de la Junta que evaluó a Milliorini y avaló sus salidas del Penal. “Esta persona sabe que un juez como Delgado lo va a volver a liberar. Tuvo que haber una Junta Penitenciaria que lo evalúe en forma satisfactoria, psicólogos y el Juez Delgado lo entrevistó y le dio la libertad. Todas estas personas cometieron irregularidades”, enumeró.
“Uno no se explica a veces algunas decisiones de los jueces. Esta persona, con un delito atroz, habiendo matado a un policía con un tiro en la cabeza, se la condena a prisión perpetua, Casación le reduce la pena y en forma inexplicable lo liberan y no controlan la conducta de esta persona. Es desconcertante”, reflexionó Rochetti.