Kurt Roll estaba jugando con su cuadróptero en la guardería de botes y lanchas de Chula Vista, California, cuando vio una columna de humo elevarse en el cielo. Roll decidió acercarse con su dron para saber qué pasaba y se encontró con la dantesca imagen de un enorme yate en llamas.

El yate "Polar Bear", de 37 metros de largo y valuado en 24 millones de dólares, pertenece a un ingeniero eléctrico jubilado llamado Larry Jodsass.