El presidente ruso, Vladimir Putin, acusó a Estados Unidos de prolongar la guerra en Ucrania como parte de lo que describió como supuestos esfuerzos de Washington para mantener su hegemonía global. “La situación en Ucrania muestra que Estados Unidos está tratando de alargar el conflicto…”, declaró Putin el pasado martes  al dirigirse a la ceremonia de apertura de una conferencia de seguridad en Moscú.

Además, el líder político dijo que Washington está “utilizando al pueblo de Ucrania como carne de cañón” al referirse al suministro de arma de Estados Unidos a Kiev y agregó que“necesitan conflictos para conservar su hegemonía”. 

Rusia invadió Ucrania en febrero, y había anticipado poca resistencia militar y esperaba una toma de poder ultrarrápida que derrocaría al gobierno en Kiev. Sin embargo, tras no poder capturar la capital, el ejército de Rusia se centró en la región oriental del Donbás.

Lo que el Kremlin consideró una victoria rápida se ha convertido en una guerra prolongada, gracias al suministro de armas a Ucrania por parte de las naciones occidentales. Desde el inicio del conflicto, Estados Unidos proporcionó ayuda económica a Ucrania desde febrero en apoyo al gobierno del presidente ucraniano Volodymyr Zelensky.