A través de una alocución transmitida por canal estatal VTV el día de ayer, Nicolás Maduro aseguró que el rechazo a la creación de una nueva Constitución chilena representaba una “derrota del proyecto histórico, una derrota de la fuerza popular constituyente del estallido social”

“¡Qué dolor para los pueblos, qué dolor para los pueblos de América Latina y el Caribe!”, sostuvo el dictador. Al mismo tiempo, cuestionó la falta de liderazgo por parte de la izquierda chilena, señalando que faltó alguien que “se pusiera al frente del texto constitucional”.

De igual forma, Maduro comparó el proceso celebrado el fin de semana en Chile con el cuestionado proceso constituyente que se organizó en Venezuela entre 2017 y 2019. “Fue un verdadero proceso originario, plenipotenciario y soberano, a diferencia del chileno que no fue un proceso popular originario”, sentenció.

Asimismo, aseguró que tanto los referéndums en Venezuela y Bolivia para cambiar la Constitución tuvieron éxito porque hubo “quien lo defendiera”.

“Lo llenaron de limitaciones y al final convocaron fue una Convención Constitucional. Mediatizaron el poder constituyente originario que se despertó del estallido social que se levantó contra (el ex presidente Sebastián) Piñera en el año 2019. Lo mediatizaron desde la primera jugada”, aseguró Nicolás Maduro.

Con el 62% de los votos en contra, una abrumadora mayoría rechazó la propuesta de una nueva Constitución en Chile. Este resultado mantiene, de momento, el texto actual, redactado en 1980, por la dictadura militar de Augusto Pinochet (1973-1990) y reformado parcialmente en democracia.