Los presidentes de los países que integran la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) y de la Unión Europea (UE) aprobaron un documento en el que reiteraron su apoyo a la solución de "controversias por medios pacíficos".

El documento fue firmado en el marco de la cumbre que se desarrolla en Santiago de Chile, donde se encuentra la presidente Cristina Fernández de Kirchner.

"Reafirmamos nuestro compromiso con todos los propósitos y principios consagrados en la Carta de las Naciones Unidas. Reafirmamos nuestra decisión de apoyar todos los esfuerzos para defender la igualdad soberana de todos los Estados, respetar su integridad territorial y la independencia política ", señala el punto 5 de la Declaración de Santiago.

En el mismo punto, los mandatarios se comprometen en abstenerse en sus "relaciones internacionales de la amenaza o al uso de la fuerza en cualquier forma incompatible con los propósitos y principios de las Naciones Unidas, a apoyar la resolución de controversias por medios pacíficos y de conformidad con los principios de la justicia y del derecho internacional".

Lo cierto es que el texto no hace referencia explícita a la disputa por la soberanía sobre las Islas Malvinas dado que entre los 61 países firmantes se encuentra Gran Bretaña.

Por otra parte, los jefes de Estado remarcaron la importancia de trabajar juntos para promover las inversiones en un marco de desarrollo sostenible.

"Reafirmamos nuestro compromiso de adoptar políticas que promuevan el comercio y la inversión entre los países de la CELAC y la UE, convencidos de que ello contribuirá a garantizar el desarrollo sostenible y que puede fomentar el crecimiento económico y la generación de empleo, especialmente el empleo juvenil, en ambas regiones", indicaron.

La declaración fue firmada por los 33 estados de Latinoamérica y el Caribe y los 28 europeos. Allí, los mandatarios consideraron que las políticas de estado "deben estar basadas en la cooperación y la complementariedad, la solidaridad y la inclusión en el social, con responsabilidad ambiental".

Por otro lado, reiteraron la "firme condena al terrorismo en todas sus formas y manifestaciones, de quién y dónde lo cometa", y expresaron la determinación de combatirlo eficazmente en todas sus formas".

Además, los jefes de Estado reiteraron el compromiso de evitar el proteccionismo en todas sus formas y señalaron que "la prioridad es el desarrollo social, la salud, la educación y la promoción de crecimiento económico sostenido e incluyente, garantizando al mismo tiempo una sociedad inclusiva, justa y equitativa".