Repasamos las pelotas de todos los Mundiales del siglo
Desde el 2002 hasta ahora cambió completamente el concepto de los balones utilizados en la cita máxima del fútbol. Desde entonces, cada cuatro años, el diseño y hasta el impacto en el juego cambia radicalmente.
Todas la pelotas han tenido su importancia y caracterizan a la historia de los Mundiales. Pero el hecho de modificar 100% el formato de un torneo al otro es un concepto moderno. Los futboleros tienen en la cabeza asociada una Copa del Mundo con una de ellas y la imagen es indeleble. ¿Cuál te gusta más?
Entre el primer Mundial de 1930 y el de 1966 se utilizó la clásica pelota de cuero. Si bien hubo alguna variación de color o en la forma de cocerla, no hubo un cambio radical: básicamente ese formato era el único concebible en un balón de fútbol.
El primer cambio abrupto se dio con la llegada de la Telstar, que se estrenó en México 1970 y repitió diseño casi idéntico para Alemania 1974. Luego llegó la famosa Tango, que se estrenó en nuestro país y repitió nombre para España 1982.
Pero, más allá de que luego cambió su denominación para cada torneo, las modificaciones en la pelota entre 1978 y 1998 fueron bastante mínimas. El concepto de crear una pelota 100% nueva, que se diferencia de la anterior lo más posible surgió para el Mundial 2002.
Fevernova - Corea del Sur - Japón 2002
Fue la última pelota con los clásicos gajos pentagonales y la primera que presentó un diseño absolutamente innovador. Sus colores y sus formas acompañan perfectamente la cultura asiática y la asociación con el Animé japonés.
Teamgeist - Alemania 2006
Significa "espíritú de equipo". Fue la primera con menos y diferentes gajos y la primera en presentar una edición especial, con detalles dorados para la final del torneo. Además, fue aquel Mundial el primero en el que se empezó a grabar en cada pelota de partido los nombres de los equipos que jugaban, la fecha y el estadio.
Jabulani - Sudáfrica 2010
Probablemente la pelota más recordad del siglo, la que muy pocos supieron domar. Siempre se recordará a Diego Forlán, el delantero uruguayo, como el que mejor se adaptó al particular viboreo y liviandad de la misma. También hubo una versión especial para la final llamada Jo'bulani.
Brazuca - Brasil 2014
Nombre inconfundible y colorido claramente asociado a la cultura brasileña. Una pelota representativa que se graba en el recuerdo de acciones puntuales como el gol de Lionel Messi a Irán o el famoso 7 a 1 de Alemania sobre el local. Tuvo una edición especial para la final en el Maracaná.
Telstar 18 - Rusia 2018
Intenta mostrar la evolución de las pelotas al evocar el recuerdo de aquellas utilizadas en 1970 y 1974, pero si no fuese por el nombre y la publicidad hecha en tal sentido, no quedaría tan claro. Fue la primera de un Mundial con un chip incorporado.
¿Con cuál te quedás?