Algunos cracks parecen no tener fecha de vencimiento. Tal es el caso de Luis Suárez, que tras un Mundial muy complicado con Uruguay, en el que no pudo evitar que su seleccionado caiga en primera ronda, debutó como nuevo jugador del Gremio de Porto Alegre. En su primer partido, sólo tardó 38 minutos en convertir un hat-trick.

El pistolero jugó los pasados seis meses en Nacional de su país, donde se preparó para estar presente en Qatar. Tras la cita máxima, varios equipos pujaron para contar con él, pero ninguno insistió tanto como el recién ascendido club del sur de Brasil.

El charrúa empezó a pagar esa confianza de entrada. En el duelo por la Supercopa Gaúcha contra el Sao Luiz, fue decisivo con tres goles para que su equipo se imponga por 4 a 1 y consiga su primer título del 2023.

El primero, probablemente el más lindo, llegó antes de los cinco minutos de juego. Recibió en el área y la tocó con sutileza por arriba del arquero. Luego, a los 32 convirtió en una buena definición mano a mano y seis minutos más tarde aprovechó de volea que el arquero había quedado caído.

El primer gol de Suárez con la camiseta de Gremio

El histórico equipo de Porto Alegre, que viene de jugar en segunda división y conseguir un complejo ascenso, ya que compitió con Cruzeiro y Vasco Da Gama, entre otros, se prepara para volver a los primeros planos de la mano de un histórico.