La inflación global y la crisis logística que atraviesa el planeta por el combo pandemia más guerra en Ucrania puede forzar a varios equipos de la F1 a perderse las últimas carreras para no superar el límite presupuestario de 2022 (140 millones de dólares). Al menos es lo que aduce Christian Horner, ariete, junto a Toto Wolff, de los pechazos de los equipos para recibir más dinero de la FOM o en cualquier caso elevar el techo presupuestario de este año.

Según el británico, "Siete de los equipos probablemente tendrían que perderse las últimas cuatro carreras para estar dentro del límite de este año. No se trata sólo de los grandes equipos. Son los equipos en el medio del campo los que realmente están luchando con problemas inflacionarios", afirmó el jefe de Red Bull.

Y a continuación, el pechazo: "La FIA tiene el deber de cuidar. Sé que se lo están tomando en serio", añadió el británico. Las facturas de energía, los costos de vida, los costos van subiendo exponencialmente y la F1 no está exenta. El transporte de mercancías se ha cuadriplicado y eso no es algo que podamos controlar", ejemplificó Horner.

Red Bull, Ferrari, Mercedes y McLaren piden una elevación del techo presupuestario, mientras que Alpine, Alfa Romeo, Williams y Haas, cuyos presupuestos de los últimos años estaban lejos del tope de 140 millones no quieren saber nada con darles otra ventaja a los ‘grandes’.

Otmar Szafnauer, jefe de Alpine, argumentó: “Si nosotros podemos hacerlo, seguro que otros también pueden hacerlo. No estoy a favor de aumentar el tope. Cuando los costos de flete aumentan en 2,5 millones o 3,5 millones pero su presupuesto de desarrollo es de 20 millones, ¿no puede hacer que su presupuesto de desarrollo sea de 17 millones y aun así estar por debajo del límite? Puede hacerlo”, dictaminó Szafnauer.

"Lo que eso hace es limitar tu desarrollo. Así que es mucho más fácil, si tenés el dinero, ir a la FIA y rosquear para aumentar el límite y mantener tu presupuesto de desarrollo igual", concluyó Szafnauer.