El resultado es corto para la diferencia que realmente hubo en el juego. Brasil pasó por arriba a Serbia, especialmente en el segundo tiempo, con un fútbol de alto vuelo. Se impuso 2 a 0 con goles de Richarlison y confirmó que es el gran candidato a ganar el Mundial.

El equipo balcánico se dedicó exclusivamente a defenderse. Se replegó y aguantó compacto en el fondo, casi sin esperanzas de atacar en ningún momento. En base a esa idea futbolística aguantó sin recibir goles durante más de una hora de juego.

Brasil tuvo paciencia y amplitud. Utilizó todo el ancho de la cancha con los extremos, Raphinha y Vinicius Jr, a quien no pudieron parar en todo el encuentro, hizo subir a los laterales por la zona interna de la cancha para generar superioridad numérica y liberó a Lucas Paquetá y a Neymar para que lleguen a pisar el área. Todo bajo la ordenada tutela de Casemiro, presente en todos lados.

En el primer tiempo no consiguió llegar del todo a fondo, pero ni bien acertó un par de pases con mayor precisión y completó algunas gambetas, para lo cual le sobra el talento, los espacios se abrieron. De hecho, así llegó el primer gol. Neymar se sacó de encima a media defensa desde la derecha hacia la izquierda, Vinicius Jr. se le metió en el medio y remató cruzado. El arquero Vanja Milinkovic-Savic, que sostuvo el resultado un buen rato, dio un rebote y Richarlison aprovechó para convertir el primero.

El seleccionado europeo se adelantó unos metros y se aproximó mínimamente al área rival mediante envíos aéreos, pero, al mismo tiempo, concedió espacios frente a un rival que lo aprovechó para florearse. Enseguida, Vinicius Jr. ganó por su sector por enésima vez y tiró un centro con la cara externa del pie derecho. Richarlison controló hacia arriba y de aire ensayó una tijera divina para clavar un violento remate contra el palo derecho y marcar el segundo.

El pentacampeón tuvo varias chances más de ampliar el resultado, entre las que se destacan dos remates en el palo, uno de Alex Sandro y el otro de Casemiro. Pasó por arriba a un adversario de nombres importantes y con razonables aspiraciones de acceder a la próxima etapa. Por ese motivo, además del nivel propio, es que su actuación fue una de las más destacadas de lo que va de la Copa del Mundo.