Novak Djokovic será deportado de Australia antes del Abierto de Australia después de que el tribunal federal en pleno desestimara el intento del número 1 del mundo de restaurar su visa.

El domingo, el tribunal rechazó una impugnación de la decisión del ministro de inmigración australiano, Alex Hawke, de cancelar la visa sobre la base de que la presencia de Djokovic en Australia podría provocar "disturbios civiles" ya que es un "talismán del sentimiento antivacunas".

El presidente del Tribunal Supremo, James Allsop, anunció que el tribunal desestimó por unanimidad la solicitud de Djokovic, con los costos a cargo de la estrella del tenis.

Allsop explicó que la decisión de la corte no reflexionó sobre “los méritos o la sabiduría de la decisión”, sino más bien si fue tan irracional como para ser ilegal. Los fundamentos del fallo se conocerán en los próximos días.

La decisión es un gran revés para la búsqueda de Djokovic de ganar su décima corona en el Abierto de Australia y su vigésimo primer título de Grand Slam.

En un comunicado, Djokovic dijo que estaba "extremadamente decepcionado" con el fallo y reconoció que significaba que "no podía quedarse en Australia y participar en el Abierto de Australia".

“Respeto el fallo del tribunal y cooperaré con las autoridades pertinentes en relación con mi salida del país”, dijo. “Me incomoda que el enfoque de las últimas semanas haya estado en mí y espero que ahora todos podamos concentrarnos en el juego y el torneo que amo", concluyó el número uno del mundo.