La novela de Novak Djokovik en Australia no termina nunca. Cuando la justicia de ese país decidió darle la posibilidad de ingresar y abandonar el hotel donde se lo mantenía iaslado, haciendo lugar a su argumento de que había tenía Covid y eso funcionaba como si estuviese vacunado, se detectaron fotos en su Instagram donde se lo ve en actividades sociales, cuando, según los documentos que presentó, cursaba justamente el Covid.

Djokovic ha culpado a su agente de un "error administrativo" al declarar que no había viajado en las dos semanas previas a su vuelo a Australia y reconoció un "error de juicio" al no aislarse tras dar positivo por Covid.

El número 1 del mundo emitió un comunicado el miércoles en un intento por abordar lo que llamó "desinformación continua" sobre sus actividades en diciembre antes de viajar a Australia.

Pero la declaración de Djokovic, publicada en Instagram, no abordó los informes de Der Spiegel que afirman anomalías aparentes con el resultado de su prueba PCR del 16 de diciembre. El informe ha planteado dudas sobre el diagnóstico positivo de Covid que forma la base de su exención para viajar a Australia.

La declaración del miércoles afirma que no se le notificó su resultado positivo hasta el 17 de diciembre a pesar de la declaración jurada de Djokovic ante el tribunal federal de circuito de que fue "examinado y diagnosticado" el 16 de diciembre.

El ministro de inmigración de Australia, Alex Hawke, ha confirmado que todavía está considerando volver a cancelar la visa de Djokovic, citando "presentaciones adicionales y documentación de respaldo extensas" de los abogados del jugador como la causa de la demora.