La Comisión Europea propondrá la legislación para el cargador único en el mercado de la Unión Europea. Si todo va según lo estimado, la propuesta se adoptará el proximo año y los países miembros tendrán un año para transponerla a una legislación nacional.

Una vez que la legislación sea nacional en cada país miembro, los fabricantes tendrán otro año extra para implementarlo. 

La idea detrás de esta legislación es conseguir un estándar único que permita a los consumidores utilizar cargadores universales e independientemente de la marca, así como un mismo cargador en nuevas generaciones de productos.

Con ello se busca reducir el impacto medioambiental y económico que implica tener múltiples cargadores diferentes. 

Desde hace años, Apple usa un tipo de cargador llamado Lightning, que es la excepción a la norma: la mayoría de los teléfonos y tabletas usan actualmente USB-C.

Además, la Comisión quiere que la venta de cargadores se desacople de los dispositivos y también proponga un puerto de carga unificado.

Apple ha justificado su cargador: las reglas que obligan a los conectores a ajustarse a un tipo “podrían disuadir la innovación”, argumentan, además de “crear una montaña de desechos electrónicos e irritar a los consumidores”.