En la Auditoría General, el oficialismo impuso su mayoría para postergar la votación. Sus representantes dijeron que no tuvieron tiempo de leerlo. Pero los radicales consideraron que lo postergan porque el informe sobre TBA compromete al Gobierno y a la empresa.

El kirchnerismo impuso su mayoría ayer en el Colegio de Auditores para evitar discutir y aprobar sobre tablas un informe crítico de la Auditoría General de la Nación (AGN) sobre el desempeño de la empresa Trenes de Buenos Aires (TBA) y los controles que hace sobre ella el Gobierno.

La evasiva del oficialismo se dio apenas ocho días después del accidente de una formación administrada por esa empresa que dejó 51 muertos y centenares de heridos en la terminal de Once. El Gobierno respondió una semana después con una intervención en la empresa hasta que la Justicia expida su informe sobre las causas del accidente, el tercero más grande en la historia ferroviaria del país.

Además, Ricardo Gil Lavedra, presidente del bloque de la UCR, y sus pares Manuel Garrido y Graciela Ocaña le solicitaron a Bonadío considerar el último informe de la AGN sobre TBA que hoy frenaron los cuatro auditores que responden al Gobierno, confirmó por Continental la diputada de la Unión para el Desarrollo Social.