Sólo quedan los cuatro mejores en la Copa América. Cualquiera sean los resultados de las semifinales, los equipos que llegaron hasta esta instancia disputarán siete partidos, el máximo posible del torneo. Sin embargo, hay algunas selecciones que por historia y peso propio tienen una mayor responsabilidad de jugar el partido por el título.

El local y gran candidato, Brasil, enfrenta a la sorpresa, Perú, en la primera de las semifinales. El andar de Brasil en el torneo ha estado lejos de su potencial. No sólo su capacidad individual, sino su probado potencial colectivo, mostrado, por ejemplo, en las Eliminatorias, hacían suponer un rendimiento mucho más alto del equipo local.

En algún tramo de la fase de grupos, la tranquilidad con la que ganó varios de los partidos generó dudas respecto de si había demostrado la totalidad de su capacidad, o se había contentado con ganar cómodamente y no gastar energías demás. Sin embargo, en el encuentro de cuartos de final frente a la siempre difícil selección chilena, quedó claro que hay cuestiones de funcionamiento que no están saliendo del mejor modo en el equipo de Tité.

Por eso, el entrenador mueve piezas casi de forma permanente y hasta modifica el esquema. Durante toda la primera rueda, apostó por un 4-3-3 definido, pero en el partido de cuartos de final, quitó un volante de juego y agregó un delantero. O al menos eso hizo por un rato, porque en el entretiempo salió Roberto Firmino e ingresó Lucas Paquetá, quien convirtió el gol decisivo. Por eso, el futbolista del Olympique de Lyon se ganó un lugar para ser titular ante Perú.

En principio, ingresará en el lugar del expulsado Gabriel Jesús, aunque el lugar de Firmino tampoco está asegurado. En ningún momento de la copa rindió acorde a su capacidad, por lo que podría perder su lugar con Gabriel “Gabigol” Barbosa, otro que tampoco ha hecho un buen torneo.

Perú es la gran sorpresa. En función de lo que han sido las campañas del seleccionado incaico desde que Ricardo Gareca asumió en 2015, hay poco de que asombrarse: de tres Copas América jugadas, en una fue subcampeón, en otra tercera y en una sola oportunidad cayó en cuartos de final. Lo que resulta digno de admirar es que en este caso puntual logró reinventarse ante la ausencia de algunas figuras históricas del equipo.

Además, hasta el momento no le ha ido bien en las Eliminatorias, incluso con la participación de algunos de esos jugadores que hoy no están. Sin embargo, el equipo de Gareca conserva la esencia, la intensidad y la competitividad.

Tras el 3 a 3 frente a Paraguay y el posterior triunfo por penales, el entrenador piensa en modificar varias cuestiones, especialmente en la defensa. De hecho, en la última práctica antes del partido probó con una última línea en la cual no repitió un sólo nombre de los que jugaron los cuartos de final.

Además, en vez de cuatro defensores, como puso en toda la Copa América, colocó una línea de cinco. Brasil y Perú ya jugaron en este mismo torneo, por la segunda fecha del Grupo B y el conjunto local se impuso 4 a 0. De hecho, en el último tramo del partido, mostró una de sus mejores versiones en todo el campeonato. Por eso, Gareca revisa y trabaja para no cometer los mismos errores.