La localidad de El Zonte, conocida por su atractivo turístico y playas para practicar surf, se convirtió, debido a los efectos de la pandemia por covid-19, en el epicentro del bitcóin. Incluso Su utilización comercial se dio antes que El Salvador, mediante la aprobación de su Asamblea Legislativa, reglamentara el uso de esta moneda virtual. Por eso, este pequeño pueblo pesquero en la costa del país centroamericano es considerado desde hace días algo así como el epicentro mundial del uso de bitcoin.

El Zonte se ganó este título cuando el presidente Nayib Bukelelo citó como inspiración de su "Ley Bitcoin" por la que esta criptomoneda convivirá junto al dólar como moneda de curso legal en todo El Salvador a partir del 7 de septiembre. “Ustedes demostraron que esto no es algo solo para gente rica. Quiero decir, esto es para todos (…). Ustedes son los pioneros aquí", dijo el mandatario en Twitter el 8 de junio. En ese momento se votaba la nueva norma en el Congreso y entre críticas de la oposición por falta de información de esta medida anunciada por primera vez solo tres días antes.

Celina Fuentes, trabajadora del pequeño comedor y tienda en El Zonte, establece que esta decisión fue debido a que, debido a los efectos de la cuarentena, muchas personas no podían salir a comprar ni acudir a los bancos por efectivo. Ante esta situación, el bitcóin fue la solución.

Lo llamativo de este fenómeno y hasta algún punto lógico desde el pensamiento promeidio es que si el uso del bitcoin logró penetrar aquí es porque El Zonte es una especie de Silicon Valley, llena de empresas tecnológicas y vecinos con educación superior aficionados a la tecnología. Sin embargo, sólo hay que caminar por este pueblo en el que siempre impera un sofocante y húmedo calor para darse cuenta de que nada tiene que ver con esa imagen.

A sus increíbles atractivos naturales, ahora El Zonte, ubicado a unos 45 minutos en auto al sur de la capital San Salvador, sumó un inesperado punto de interés para turistas: su cajero automático de bitcoin. Frente a él se ven grupos de personas durante todo el día que en ocasiones no hacen más que tomarse selfies o grabarse videos utilizándolo. Este es uno de los tres únicos puntos que existen en todo el país donde se pueden cambiar dólares por bitcoin, y viceversa.

Jessica Velis es quien se encarga de atender pacientemente a quienes se acercan al cajero cargados de dudas sobre el sistema de bitcoin. Dice que si antes le llegaban al día entre dos y cinco personas, desde que el presidente Bukele anunció la leyson unas 40. "La verdad que ella nos informa mucho más que el propio presidente sobre cómo funciona (la aplicación) de Bitcoin Beach, cómo abrir una cuenta y hacer los cambios de moneda en el cajero", se queja uno de los clientes.

A pesar de todo esta actividad que fue aprobada y también rechazada el gobierno salvadoreño ha sido criticado por ofrecer información a cuentagotas sobre una iniciativa de tanta importancia, por el hecho de que Bukele haya hecho anuncios y entrevistas en inglés que parecían más enfocadas al público extranjero que a su propia población y por haber aprobado la ley de manera exprés en la Asamblea de Diputados en la que su partido tiene mayoría.

Mike Peterson siempre se escucha como uno de los principales responsables de que Bitcoin Beach sea una realidad. Se enamoró de El Zonte hace casi dos décadas y, en los últimos años, pasa más tiempo en El Salvador que en su California natal, donde dirige una empresa de venta de comida rápida para eventos. Junto a su familia se implicó en los proyectos sociales de Hope House (Casa Esperanza), una organización local sin fines de lucro que trata de mejorar la educación y oportunidades de la población de El Zonte.

Medir el éxito de Bitcoin Beach de manera objetiva es complicado porque no existe ningún estudio sobre cuánto contribuyó a mejorar realmente la economía local. La situación de sus vecinos sigue siendo claramente precaria en el mayor de los casos. En palabras de Peterson, con la app de Bitcoin Beach se realizan en la actualidad unas 1.000 transacciones diarias y el número de usuarios registrados pasó de 5.000 a 20.000 tras el anuncio de Bukele.

Claro que no todos son usuarios activos ni están basados únicamente en El Zonte. Muchos se preguntan cuánto de lo aprendido en el experimento de El Zonte podrá ser aplicado realmente en el resto del país cuando la Ley Bitcoin entre en vigor. David Gerard, autor del libro Attack of the 50 Foot Blockchain, escribió en su página web que esta experiencia es "artificial" debido a que los bitcoin son subsidiados y fueron inyectados por donaciones.

Pero Peter McCormack, uno de los referentes mundiales del bitcoin gracias a su podcast What Bitcoin Did y que recientemente se reunió en El Salvador con el presidente Bukele, cree que esa donación solo fue importante a la hora de poner en marcha el proyecto.