Continúa el conflicto laboral por el posible cierre de Paraná Metal en la provincia de Santa Fe.

Ayer, a las siete de la tarde, el ministro de Trabajo se comunicó con los trabajadores y los convocó para una reunión esta mañana en la sede de la cartera.

Por ello, los operarios suspendieron provisoriamente el corte en Villa Constitución hasta que se tengan claros los resultados del cónclave.

Por Continental, y en plena reunión, Carlos Tomada consignó que su Ministerio está “charlando con los trabajadores y con la empresa para ver si se pueden salvaguardar algunos puestos de trabajo. La empresa está en quiebra y no hay quien se pueda comprometer con el giro productivo que necesita para seguir funcionando”.

En La Mañana, dio pábulo a la versión de la patronal sobre el conflicto, al acotar que “ha habido conflicto en estos tiempos” y que “esa conflictividad tampoco ayudó a que la empresa pudiera ponerse de pie”.

Ayer, también en charla con Víctor Hugo, el gerente general de Paraná Metal, Carlos Leone, acusó a la UOM de haberle hecho perder su principal cliente (Ford de Brasil) porque, debido a medidas de fuerza, no se pudo entregar en término un importante pedido.

No obstante, Tomada defendió el accionar de su cartera en este tipo de conflictos, al recordar que, “en otros tiempos, se hacían ajustes en empresas y salían disparados miles de trabajadores mientras el Estado miraba para otro lado. Nosotros lo que estamos haciendo es buscar alguna solución, alguna respuesta y facilitar el ingreso de la gente a otra empresa u actividad laboral. Sabemos que es difícil, pero la gestión no la voy a dejar de hacer nunca”, se ufanó.

“Por otro lado, el corte, tengo entendido que mientras estamos reunidos acá, no se va a llevar adelante. Fue un gesto que pedí y lo valoro de los trabajadores que lo han aceptado”, ponderó.