Una beba de apenas un año se convirtió en la paciente más pequeña en recibir dos implantes cocleares.

Con sólo catorce meses de vida, Emilia Succurro recibió los dispositivos electrónicos, de menos de cuatro milímetros cada uno, que reemplazan la función del oído.

“Este implante logra que una persona que padece sordera profunda logre oír y hablar al igual que cualquier persona con audición normal”, explicó por Continental el presidente de la Fundación de Otorrinolaringología.

Puntualizó Vicente Diamante que “el año de vida es la edad minima permitida para la intervención" y destacó "el aporte de la obra social, que se hizo cargo de los gastos”.

“Es muy emotivo. En este país ya podemos hacer implantes cocleares bilaterales en niños cuando tienen sorderas profundas”, exaltó en Magdalena Tempranísimo.