El Gobierno lanza la campaña para solicitar la “baja voluntaria” de los subsidios. Los avisos comerciales apuntarán hacia la solidaridad y responsabilidad social.

Mientras tanto, los técnicos de las empresas eléctricas y gasíferas trabajan a contrarreloj para poner en marcha, el lunes, el registro de renuncia.

Los usuarios deberán acercarse a las oficinas comerciales de las compañías. También podrán hacerlo mediante la página web de las firmas o vía telefónica.

Los aumentos comenzarán a percibirse desde enero. Las subas oscilarán entre un 150 y un 400 por ciento, según el servicio y el usuario, aunque serán exceptuados los hogares donde habitan personas enfermas o con discapacidad, los jubilados que cobran la mínima y los beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo.

Las asociaciones de consumidores se reunirán con los entes reguladores la próxima semana para verificar y aceitar los trámites.