A poco de conocerse el premio Nobel de la Paz 2010 otorgado al chino Liu Xiaobo, Adolfo Pérez Esquivel, también galardonado con el mismo premio en 1980, recordó que su experiencia y el contexto del laudo fueron muy similares a los del oriental.

Pérez Esquivel recibió el Nobel mientras corría la dictadura en Argentina. “Fue sorpresivo lo que pasó con Liu en China y la represión del gobierno del régimen. Allí, se violan regularmente los Derechos Humanos, vasta tener presente lo que ocurre en el Tíbet donde se comete un genocidio contra el pueblo y después el gobierno chino presiona para que no reciban al Dalai Lama”.

En ese sentido, el pacifista argentino precisó que en ese momento “yo recibí el premio a pocos días de dejar la cárcel. Dos días después intentaron asesinarme; esperemos que eso no ocurra con Liu”.

El activista chino Xiaobo se encuentra en prisión; cumple condena a once años por difundir un documento a favor de reformas políticas democráticas para su país.

“Todos corremos peligro por el trabajo que hacemos. Vamos a trabajar para que el gobierno chino lo libere”, advirtió.