El sacerdote Eduardo Farrell exhortó “incorporar al ciudadano latinoamericano, a quien no puede considerarse un extranjero”.

El sacerdote católico confesó que tiene “una tristeza y un dolor muy grande” por las declaraciones xenofóbicas de Mauricio Macri.

“Me da una pena enorme ser testigo de esta situación de xenofobia, de rechazo a hermanos, que no son extranjeros. A mí me resulta muy difícil ver a un paraguayo como a un extranjero”, enfatizó el cura.

“Esta es una situación que me duele, como argentino y como cristiano. Hay que tomar en cuenta el sufrimiento del que emigra. El dolor del que ha tenido que dejar su tierra es enorme”, alertó en La Mañana.

“Hay que evitar todo aquello que exalte sentimientos discriminatorios”, instó.