El presidente Alberto Fernández aseguró que no indultará a Milagro Sala porque la Constitución le “prohíbe”. Asimismo, afirmó que tiene la “convicción” de que todo el proceso judicial alrededor de la dirigente jujeña, condenada a 13 años de prisión por la causa Pibes Villeros, “estuvo plagado de un tinte político inadmisible”.

"Me parece que la solución no pasa por un indulto mío porque la Constitución me lo prohíbe, por tratarse de una sentencia dictada por tribunales provinciales”, aseguró el mandatario. En las últimas semanas han habido reclamos por parte de sectores del Frente de Todos para que se dicte un decreto que purgue la situación penal de la referente social.

Fernández remarcó que, “con mucho pesar”, como Presidente solo puede “indultar en sentencias de jurisdicción federal”, una circunstancia que no aplica a la sentencia contra Milagro Sala, a raíz de que el caso “Pibes Villeros” es de órbita provincial.

“Soy un hombre de derecho y no puedo vulnerar la Constitución”, resaltó el mandatario en declaraciones a Radio Con Vos.

No obstante, según la perspectiva del jefe de Estado,se podría hallar una alguna alternativa. Al tratarse de una jurisdicción provincial, el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, “podría conmutar la pena”.

“Milagro Sala vivió casi 7 años de prisión preventiva sin condena firme, y eso es algo muy abusivo”, declaró el presidente. De igual manera, se mostró de acuerdo con que “se debería plantear el tema en los organismos internacionales”, ante la resolución taxativa de la justicia argentina.

“La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) llamó la atención sobre las condiciones de encarcelamiento que vivía Milagro Sala y ordenó su detención domiciliaria. Si el tema se lleva a los tribunales internacionales, ahí tal vez se abra una instancia”, subrayó.