Por fin se produjo la reunión de la Mesa Nacional del Frente de Todos, de la que participaron las tres principales vertientes de la alianza gobernante, y que contó con la sorpresiva presencia de Máximo Kirchner.

El ecuentro se produjo en la sede del PJ porteño, en Matheu 130 de la Ciudad de Buenos Aires, y asistió el presidente Alberto Fernándes y el jefe de gabinete, Agustín Rossi, por el albertismo, el ministro del interior Eduardo De Pedro y Máximo, por el kirchnerismo, y el ministro de Economía Sergio Massa y Malena Galmarini, por el massismo; entre otros.

La pronicipal conclusión fue solamente simbólica, todos acordaron “condenar” la supuesta proscripción de Cristina Kirchner. Pero en materia de posicionamientos electorales, hubo dos posturas contradictorias. Alberto, blanqueó su voluntad de ir por la reelección, aunque aseguró que “si aparece alguien mejor yo me bajo”.

Por otro lado, el kirchnerismo pidió que la Mesa armara una comisión encargada de convencer a Cristina, que la candidata sea ella. 

Además emitieron un documento que entre otras cosas dijo: "En 2023 se enfrentarán dos modelos de país. La Argentina de un progreso compartido, democrática e igualitaria; y el anacronismo de una derecha que concibe al país como una plataforma de negocios para unos pocos”. 

Por otro lado indicron: “la responsabilidad disponer las acciones necesarias para impedir la proscripción de la compañera vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner cuyo liderazgo y potencia electoral no nos puede ser arrebatado”.