Mauricio Macri insiste en que la causa en la que se le confirmó el procesamiento por escuchas ilegales está armada por el kirchnerismo, y reitera su intención de “acelerar el juicio oral”.

“Los penalistas míos están afuera. El lunes tendré una reunión con ellos y me dirán si se puede acelerar el juicio oral. Depende del juez (Norberto Oyarbide), que hasta ahora hizo todo lo posible para complicarme la vida”, informó por Continental.

Para el jefe de Gobierno porteño, “hay quienes buscan el oportunismo político y sacar ventaja de esto y no se dan cuenta del daño a la institucionalidad. Operadores como Javier Fernández logran que los jueces de una Cámara terminen firmando este fallo que tiene por lo menos quince mentiras. Quieren hacer creer que un jefe de gobierno espió a ocho personas comunes, ningún político importante”.

“Además Ciro James es una sola persona, no un equipo de espionaje, compra un equipo por la Policía Metropolitana que vale cinco millones de dólares para hacer sus propias escuchas. ¿Dónde está la estructura? No hay tal estructura. Son muchas personas y equipos (los necesarios para realizar tareas de este tipo). Todo lo que hay es un señor que trabajó en el Ministerio de Educación. ¿Dónde está la estructura? Es todo un cuentito que se basa en suposición tras suposición, y nada está probado”, se indignó.

En Magdalena Tempranísimo, minimizó la influencia del Fino Palacios en toda la situación, así como su enconada defensa del funcionario que eligió para dirigir la Policía Metropolitana, antes de ceder a la opinión pública y la oposición. En cambio, alegó que el ex policía federal “estuvo tres semanas en la Metropolitana. Oyarbide y los tres jueces terminan siendo cómplices de una maniobra política transformada en una causa judicial”, consideró.

Sobre la presencia de Ciro James en el Ministerio de Educación porteño, arguyó que “(el ex ministro Mariano) Narodowski estuvo cinco meses para dejar entrar James. La ANSeS no tiene guardado que es policía secreto. Si él no lo declara, no hay forma de enterarse”.

“Mi padre mandó a espiar a Leonardo por la seguridad de su hija. Cómo lo investigó, no tengo idea”, se defendió a ese respecto.
Cuando nuestra periodista María O’Donnell señaló que “dijo que había contratado a Akerman Group”, le retrucó que “estás hablando como los jueces de la Cámara. No sabemos a quién contrató”.

Sobre las declaraciones públicas de su padre, Franco Macri, desestimando el principal argumento que esgrime en contra del procesamiento, admitió que “es doloroso que surjan cuestiones familiares, pero son cosas que tienen que ver con historias familiares de cada uno”.

“La Cámara no investiga a Ciro James. Lo cita para que hable cuando trabajó en Boca Juniors. Estamos en un país donde una Cámara es capaz de escribir opiniones de opositores”, añadió Macri.

Y concluyó, tajante, que “cuando se sepa la verdad, los jueces van a tener mucho que explicar”.