Los restos de las víctimas del accidente aéreo de Río Negro llegaron esta mañana a Buenos Aires. El hielo habría sido la causa del siniestro, que ocasionó veintidós muertos.

La caja negra del avión ya es analizada por los expertos de la junta de investigaciones de accidentes aéreos y es clave para confirmar por qué se cayó la aeronave, aunque demorará el resultado. Este viernes, finalizaban las tareas de remoción de los restos del avión, que quedaron desparramados en un área de unos cien por trescientos metros. Los cuerpos estaban “irreconocibles”, señalaron los funcionarios.

El vicepresidente de Sol negó que la azafata fallecida, Jessica Fontán, haya denunciado irregularidades en vuelos de la compañía. Juan Nyffenegger salió al cruce de la Asociación Argentina de Aeronavegantes y de la familia de la azafata del trágico vuelo 5428.

Por Continental, Ricardo Frecia, secretario del gremio, afirmó que la azafata había realizado varias denuncias por las condiciones de trabajo. En Magdalena Tempranísimo, añadió que la compañía “viola sistemáticamente las normas” de protección de los tripulantes.

Sin embargo, el secretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi, aseguró que “todo estaba en regla” y que la aeronave “había cumplido con todas las revisiones técnicas”.