La desigualdad, el hambre y la pobreza que acrecentó el Covid 19 entre países y regiones, no hacen otra cosa que confirmar que las pandemias siempre fueron precursoras de conflictos sociales.

“Desde la plaga de Justiniano en el siglo VI y la Peste Negra del siglo XIV hasta la gripe española del 1918, la historia está repleta de ejemplos de epidemias que tienen fuertes repercusiones sociales: transforman la política, subvierten el orden social y provocan estallidos sociales”, afirman los autores del informe Philip Barrett y Sophia Chen.

Las enseñanzas del pasado para poder actuar en el presente y prevenir el futuro, serán claves según la investigación. “Entender las implicaciones en el malestar social es crucial para prepararse para posibles repercusiones causadas por el coronavirus”, han detallado sus autores en el texto.

La aparición de las vacunas y los paquetes millonarios para la reactivación de la economía parecen no alcanzar para sectores históricamente olvidados que aprovecharon esta pandemia para “levantar la mano y finalmente ser escuchados”.

Ambos científicos del FMI se han basado en los datos extraídos del Índice de Disturbios Sociales Reportados que cuenta con el estudio de 569 hechos en 130 países ocurridos entre 1980 y 2021