“Aparentemente, no hay más contacto entre los allegados y los prófugos”, enfatizó Hugo Icazati, abogado de Víctor Schillaci, uno de los tres evadidos del penal de General Alvear.

“Puede ser que estén cercados y por eso mantengan cierto silencio”, remarcó el letrado.

Para Icazati, los prófugos “no tienen ayuda” de nadie para seguir desaparecidos.

“Es gente que cometió uno de los hechos más resonantes de la Argentina”, subrayó.

“Acá no estamos hablando de cocaína o marihuana…estamos hablando de narcotráficos de precursores químicos. En el país fueron avanzados…ellos están metidos en estos temas”, dijo el abogado por Continental.

“Pienso, humildemente, que por esto carecen de estructura. Cuando uno planifica una fuga como esta tiene que tener cierto soporte: varios vehículos, documentación apócrifa, dinero…”, agregó Icazati.

“No me consta…pero si son ellos, están dispuestos a todo”, subrayó.

En la conversación que mantuvo con los evadidos, el abogado les recomendó entregarse. “Hay que entregarse, hay que terminar con todo esto. Si están dando vueltas sin rumbo y sin apoyo, no pueden estar así mucho tiempo”, relató.

“Hablé con el ministro de Seguridad, Cristian Ritondo, y coincidimos en que todo sea pacífico y conforme a la ley”, señaló. El letrado se mostró escéptico con respecto a la captura de los prófugos. “O realmente no están tan cercados o las fuerzas de seguridad están esperando que salgan de la zona urbana para minimizar los daños a terceros”, afirmó Icazati.

“Es grave…a la condena que tienen, se suma la evasión y la tenencia de armas de guerra”, agregó.