El presidente del gobierno español, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, anunció  una profunda y amplia remodelación de su gobierno, en su peor momento político desde que llegó al poder en 2004, tras el desgaste sufrido por el manejo de la crisis económica en su país.

La remodelación incluye la salida de la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, cuyo cargo será ocupado por Alfredo Pérez Rubalcaba, quien mantendrá la titularidad del Ministerio de Interior y se convertirá en nuevo “hombre fuerte” del Ejecutivo.

La reforma de gabinete se produce en un momento de claro declive del gobernante Partido Socialista Obrero Español (PSOE) en las encuestas, que dan a la principal fuerza opositora, el Partido Popular (PP), como vencedor en unos eventuales comicios generales.