Más de 500 manifestantes, incluidos 69 menores, han muerto durante estas movilizaciones, según la agencia de Activistas de los Derechos Humanos, HRANA (por sus siglas en inglés). A esta cifra se suman dos personas que fueron ejecutadas por el gobierno y al menos otras 26 podrían correr la misma suerte, en lo que la entidad Amnistía Internacional ha llamado "juicios falsos".