Al menos 350 personas murieron ,y  1.300 resultaron heridas tras el terremoto de 6,5 grados en la escala de Richter que se produjo en la provincia de Yunnan, en el suroeste de China.

El Servicio Geológico de Estados Unidos dijo que el sismo se registró a una profundidad superficial, de menos de 1,6 kilómetros.

"Sentí una fuerte sacudida en mi piso, en una quinta planta, y algunos objetos pequeños empezaron a caer de las estanterías", señaló un residente de Ludian a la agencia oficial Xinhua.

La mayoría de la gente salió de sus viviendas corriendo hacia la calle, señaló la residente, quien precisó que la electricidad se cortó y los servicios de comunicaciones se vieron afectados, por lo que es difícil contactar con los vecinos de Ludian por teléfono.

Otro testigo indicó que sintió como si estuviera "navegando un barco" cuando conducía su coche durante el temblor. La administración provincial de Yunnan envió un equipo de emergencia de 30 personas al epicentro del sismo, por lo que se hallaban evaluando la situación.

En tanto, el Gobierno enviará 2.000 tiendas de campaña, 3.000 camas, 3.000 colchones y 3.000 abrigos a la zona del desastre, según el reporte.