“Queridos, jóvenes, el Señor hoy los llama. No al montón, a cada uno”, dijo Francisco en la Vigilia de Oración, ante los jóvenes en Copacabana, Brasil. “También hoy el Señor los sigue necesitando para su iglesia. El Señor los necesita”, indicó.

“Cada uno de nosotros somos el campo de la fe de Dios”, continuó. “¿Qué clase de terreno somos? ¿Qué clase de terreno queremos ser? Yo sé que ustedes quieren ser buena tierra. No cristianos almidonados, de fachada. Sino cristianos auténticos”, dijo el Papa a las personas presentes en el lugar.

"Sé que ustedes no quieren vivir en la ilusión de una libertad que se deja arrastrar por la moda y la conveniencia del momento. Sé que apuntan a lo alto, a decisiones definitivas. Si es así, estemos en silencio, miremos el corazón, y cada uno dígale a Jesús que quiere recibir la semilla".

"Jesús nos pide que lo sigamos toda la vida, nos pide que seamos sus discípulos, que juguemos en su equipo. A la mayoría de ustedes les gusta el deporte, aquí en Brasil el futbol es pasión nacional. ¿Qué hace un jugador cuando lo llaman para formar parte de un equipo? Tiene que entrenarse mucho. Jesús nos ofrece algo más grande que la Copa del Mundo. Nos ofrece la posibilidad de una vida fecunda, feliz", dijo Francisco.

La playa de Copacabana recibió la visita de cientos de miles de peregrinos que se animaron a entrar al mar bajo la llovizna, jugaron a la pelota e hicieron guitarreadas para esperar la Vigilia de Oración presidida por el Papa Francisco.