Al menos 43 personas murieron este lunes en Filipinas durante un violento terremoto que azotó al país. El temblor alcanzó los 6,9 grados de magnitud en la escala de Richter.

Los heridos, en tanto, se cuentan por centenares, ya que hubo corrimiento de tierras y caída de algunas viviendas.

Un corrimiento de tierras provocado por el terremoto en la región de Planas provocó la muerte de 29 personas. Otras 10 perdieron la vida en Giuhulngan, dos en Tayasan, otra en Bindoy y una más en Jimalalud, en Negros Oriental.

El sismo ocurrió entre las islas de Negros y Cebu, 573 kilómetros al sureste de la capital, Manila. En un primer momento, las autoridades decretaron una alarma por tsunami, pero posteriormente lo levantaron.