Intensas nevadas, fuertes vientos y un frío glacial golpean el noreste de Estados Unidos, donde el comienzo del año llegó con "Hércules", una feroz tormenta de invierno que afecta a varios estados, entre ellos el de Nueva York, que declaró estado de emergencia por la situación.

Para Nueva York, se pronostican más de 20 centímetros de nieve y vientos helados superiores a los 50 kilómetros por hora, con temperaturas de hasta 12 grados bajo cero y una sensación térmica que podría llegar a -23°.

Las aerolíneas estadounidenses han cancelado más de 2300 vuelos en todo el país y las autoridades educativas han dispuesto el cierre de las escuelas en ciudades de Nueva Inglaterra y de Nueva York, ampliando el descanso que comenzaron con las fiestas navideñas.

La adversidad climática también afectó a los organismo públicos e internacionales, como la ONU, que hoy advirtió que mantendría su sede central, ubicada en Nueva York, cerrada.