El Fondo Monetario Internacional advirtió sobre un posible empeoramiento de las perspectivas para la economía mundial, luego de que recortaran su pronóstico de crecimiento global para el próximo año a 2,7% (en enero habían anunciado que sería de 3,8%). Aseguran que los números han empeorado por el daño de la guerra en Ucrania y la desaceleración de China.

“Lo peor está por venir, y para muchas personas 2023 se sentirá como una recesión”, escribió el economista jefe del prestamista, Pierre-Olivier Gourinchas, en el prólogo del informe. “A medida que se acumulan nubes de tormenta, los formuladores de políticas deben mantener la mano firme”.

El organismo informó que existe el riesgo de que alrededor de un tercio de la economía mundial se contraiga el próximo año. Asimismo, aseguró que el impacto del endurecimiento de la política monetaria de la Reserva Federal se sentirá a nivel mundial, y la fortaleza del dólar frente a las monedas de los mercados emergentes y en desarrollo se sumará a las presiones sobre la inflación y la deuda.

La advertencia vino luego de que los jefes de finanzas y del banco central se juntaran en Washington para las reuniones anuales del prestamista. Durante las charlas, la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, advirtió que los costos de endeudamiento más altos en EEUU, la economía más grande del mundo, están “comenzando a afectar”, mientras que el presidente del Banco Mundial, David Malpass, señaló el “peligro real” de una recesión global.

Asimismo, el FMI pronosticó que la inflación alcanzará su punto máximo a finales de este año, con una tasa anual del 8,8 %, y se mantendrá elevada durante más tiempo de lo esperado, y solo se desacelerará al 6,5 % el próximo año y al 4,1 % para 2024.