La Audiencia de Barcelona ha decidido dejar en libertad provisional al exjugador del Barcelona, Dani Alves, bajo fianza de un millón de euros, a la espera de que se confirme la sentencia que lo condenó a cuatro años y medio de cárcel por violar a una joven en una discoteca. La decisión de la Audiencia incluye medidas cautelares como la entrega de sus pasaportes, la prohibición de salir de España, la obligación de comparecer semanalmente ante el tribunal y la prohibición de acercarse a la víctima.

La defensa de Dani Alves está trabajando para reunir la fianza exigida por el tribunal y así lograr su liberación. La Audiencia argumenta que el riesgo de fuga se ha reducido tras la condena impuesta y que la pena se ha visto disminuida en comparación con las peticiones iniciales. Además, se destaca que Alves se entregó voluntariamente a las autoridades al conocer la investigación en su contra y ha manifestado su intención de permanecer a disposición del tribunal.

A pesar de la decisión mayoritaria de la Audiencia a favor de la libertad provisional, un magistrado emitió un voto particular en el que sostiene que Alves debería permanecer en prisión debido a su capacidad económica, el riesgo de fuga y la posibilidad de que la condena se agrave en instancias superiores. Se argumenta que la función judicial se vería comprometida si no se ejecuta la sentencia, y se señala la importancia de garantizar que el acusado reciba un tratamiento de rehabilitación adecuado.