Al menos 123 personas han muerto o desaparecieron en dos provincias chinas desde el pasado jueves.

Es por las inundaciones y los deslizamientos de tierra provocados por lluvias torrenciales.

En la localidad de Ankang, en la provincia de Shaanxi (noreste), ocho personas murieron y 57 estaban en paradero desconocido por culpa de los deslizamientos de terreno ocurridos el domingo.

En provincia vecina de Sichuan, dos afluentes del río Yangtse superaron en nueve metros los niveles de alerta, e inundaron numerosas localidades.

Además de los 123 muertos o desaparecidos, 700.000 personas fueron desplazadas de sus hogares en las provincias de Sichuan y Shaanxi, según el ministerio de Asuntos Civiles.

Desde hace dos meses, China sufre las peores inundaciones en de la última década.

Según el último balance oficial fechado el 13 de julio, 13.567 personas murieron y 251 desaparecieron a causa de inundaciones en lo que va de año, y las pérdidas económicas ascienden a 116.000 millones de yuanes (17.000 millones de dólares).