La mortalidad infantil durante el primer año de vida cayó un 47,6 por ciento entre 2000 y 2010 en Brasil, según datos del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE) divulgados hoy.

La presidenta del IBGE, Wasmália Bivar, explicó que este resultado se debe a las políticas públicas que los sucesivos gobiernos fueron aplicando en las áreas de salud, escolaridad de las madres, el aumento de los ingresos de las familias más pobres y la reducción del número de hijos en esas familias.

En relación con esto último, los datos indican que el número de hijos por mujer cayó de 2,38 a 1,9 en los diez años comprendidos en el censo. "Como las madres tienen menos hijos para cuidar, tienen más tiempo para cuidar de cada uno y aprovechar los beneficios y avances en salud", dijo Bivar.

Sobre los niveles de instrucción, los datos indican un considerable incremento en el porcentaje de brasileños mayores de 25 años que completaron los estudios secundarios. En el año 2000, ese porcentaje era del 23,1 por ciento, mientras que en 2010 creció hasta el 35,8 por ciento.

En otro orden, el censo reveló que el número de inmigrantes aumentó un 86,7 por ciento, de los cuales el 65,5 por ciento son brasileños que habían emigrado y retornaron al país. "Hay una situación difícil, sobre todo en Europa y en Japón, y oportunidades que son más o menos más claras en Brasil", subrayó al respecto el investigador del IBGE Luiz Antonio de Oliveira.